El interés por llevar un estilo de vida saludable, por cuidar nuestra alimentación y saber qué estamos comiendo crece cada día. Queremos adelgazar y mantenernos saludable; pero no a costa de nuestra la salud y sí vigilando la alimentación y apostando por una dieta saludable y equilibrada a largo plazo.
Pero, ¿cómo pueden ir de la mano adelgazar y comer bien?
Una dieta saludable se basa en una alimentación natural con alimentos frescos y sin procesar y que evite las grasas saturadas y las harinas refinadas.
“Tiene que ser equilibrada y aportar las necesidades diarias tanto de macronutrientes como de micronutrientes. Además, debe ajustarse al biorritmo humano, aportando alimentos más energéticos (hidratos de carbono) en el periodo diurno de actividad, y más estructurales (proteínas y grasas saludables) en el periodo nocturno de reparación”.
Tu dieta debe ser personalizada y adaptada a tus necesidades personales como tu edad, actividad física que realices, composición corporal, enfermedades o padecimientos, intolerancias alimentarias, gustos culinarios y tu ritmo de vida.
Consejos para el día a día
- Visita a un especialista en Nutrición y Dietética para que elabore un plan de alimentación que cumpla con los requisitos anteriores.
- Planifica tus comidas y lista de la compra. Evita la improvisación y procura hacer compras una vez por semana o dos veces al mes.
- Realiza 5 comidas al día: 3 principales y 2 meriendas. Come despacio. Mastica bien todos los alimentos.
- En todas tus comidas diarias debes combinar siempre una proteína + hidrato de carbono (integral, fruta o verdura) + 1 grasa saludable.
- Bebe entre 2 litros y 2,5 litros de agua diariamente.
- Come entre 5 y 7 raciones de fruta y verdura al día, seleccionándolas en su forma fresca y natural y evitando los envasados.
- De ser posible, consume frutas con cáscara.
- Consume entre 0,9grs y 1,5grs de proteínas magras por kilo de peso. La variación dependerá de si se realiza actividad física y si es así, de qué actividad se hace, siendo 0,9grs para las personas sedentarias y 1,5grs para los que realizan un deporte intenso.
- Evita el azúcar, los endulzantes con calorías o aquellos alimentos que los contengan.
- Desayunar como un rey, comer como un príncipe y cenar como un mendigo.
- No abuses de las bebidas alcohólicas. Puedes tomar entre una y dos copas de vino tinto o 1 o 2 cervezas.
- Evita los embutidos. Si deseas incluirlos en tu dieta, prefiere los de pavo o pollo.
- Ingerir frutos secos diariamente.
- Evitar alimentos pre-cocinados y excesivamente procesados.
- Consume carne rojas 2 veces por semana y pescado o marisco 4 veces por semana.
- Comer 1 o 2 veces por semana legumbres.
- No cocinar en exceso los alimentos. Evitar el microondas.
- Evitar los fritos y los empanados.
Tenemos que comprender que la alimentación es el pilar más fuerte que sostendrá nuestra calidad de vida y salud a lo largo de nuestra vida, por lo que bien merece la pena darle la importancia que realmente tiene.